Servicio reanudado

Hola queridos lectores, he vuelto a las andadas. Ha transcurrido mucho tiempo desde la última vez que estuve rondando por acá (entre ellas, me vi obligada a cortar con la cuenta regresiva, mil disculpas por eso, fueron motivos extremos más allá de mi poder), ya que estuve paseando por los alrededores del lago Nahuel Huapi (no me pude llevar la computadora por problemas de la misma con la batería); haciendo guerras de nieve, esquiando o recorriendo el centro en busca de una buena casa de chocolates y esquivando contingentes de estudiantes… En ese entonces, mi grado de bronca iba en aumento por dejar terriblemente colgado el blog y no haber podido hacer una entrada comentando que iba a cancelar la cuenta regresiva. Tanto, que tuve que encargar a mi mejor amiga (aquí uno de sus blogs, y aquí el otro) para que les comentara acerca de este acontecimiento; para más información, leer la entrada anterior.

En fin, en lo que fue volver a mi lluviosa y querida Buenos Aires, fueron 3 días de desarmar valijas, ordenar ropa, doblar remeras, abrir bolsos y demás. Entre esos días, se conmemoró un nuevo aniversario de mi nacimiento. Más precisamente el día sábado. Sé que lo dije vía facebook, pero vuelvo a repetirlo: agradezco a aquellos que tuvieron el gesto de saludarme, ya sea con una firma del muro, un mensaje al chat, al celular, una llamada o una visita. Diría “gracias a los que se acordaron…” pero sé que no es así, ya que en la gran mayoría de casos, es el facebook mismo el que recuerda a los demás las fechas de cumpleaños. Lo único que quiero expresar al respecto, es la caraduría de ciertos individuos al saludarme y dedicarme una cantata de cursilerías al mejor estilo de “que seas feliz, que se cumplan tus deseos, que la pases muy bien, bla bla bla…”. Para ser más exacta, fue una sola persona la que fue caradura; me ignora cuando me ve, no me saluda cuando me pasa por al lado y cuando nota mi presencia, se hace increíblemente el pelotudo y no me registra. Diría el nombre de esa persona, pero tengo fe en que si llega a leer esto se va a sentir tocado; tampoco soy una persona tan irrespetuosa, él sabe que lo hace (y por qué lo hace) y sólo él sabe los motivos. Espero que algún día se saque la careta de encima y tenga las pelotas puestas para decirme la verdad… Saliendo de esto, vuelvo a agradecer a quienes me saludaron. Fue un cumpleaños tranquilo, recién llegada de Bariloche y acompañada de mis seres queridos.

Lo que respecta al resto de mi vida; el día de mañana tengo evaluación de historia, estoy pensando urgentemente en internarme en algún gimnasio o similar -soy una vaca más vaca que lo normal-, tengo que ver cuanto antes a mi mejor amiga, mi computadora necesita una batería nueva (gracias cuñado por conseguirme una) y tengo unos buenos temas para escribir en el blog próximamente, como por ejemplo, el plaggio que estoy sufriendo. No es por nada; hoy vi un blog que tenía copiada mi estética, mis expresiones E INCLUSO LA TEMÁTICA DE MIS ENTRADAS, algo terriblemente pobre y patético para quien administra y mantiene un blog; alimentar el suyo de los contenidos de los blogs ajenos… Creo que es algo triste. Pero en fin, voy a profundizarlo en la entrada que viene. Me despido con cariño, yo.