8 days*

Debo contarles, querida gente que sigue mi blog, que hoy fue un día bastante pesado, por la tarde especialmente, por lo que mi humor no fue bueno de llevar. Como bien dije en twitter, ir al colegio los viernes se convierte realmente en algo tedioso y molesto. Sobre todo si tenés a una profesora que es la pesadilla de todo estudiante secundario y un profesor de cultura que, cuando quiere, también se hace bastante difícil bancarlo… Podría decirse que es el responsable de mi mal humor de hoy a la tarde. Digamos, se puso a hablar de la presidente (diciendo que nosotras, mujeres, tenemos que estar orgullosas de que sea ella, una mujer, que nos represente en el mundo… Sin comentarios), nos dio un apunte zarpado de la introducción a la no se que poronga, contrato del no sé qué, no me acuerdo… ¿Y yo? Sin ganas de hacer un carajo, saturada y escribiendo, en mi blog, en mi mundo, tratando de desentenderme un rato de la clase…

La idea de esta entrada vino después, cuando dijo: “es una idea que tengo; tengo que hablar con Juan (el director) y ver si me da el ok, pero la idea sería así… Cortamos la clase 10 minutos antes, y de a dos o de a tres, eligen una canción para mostrarnos y decirnos el por qué. ¿Qué les parece?”. Todos empezaron a decir que sí, salvo Cami, que la tenía al lado, y todos estaban bastante entusiasmados. Acto seguido; los pocos que eran en el aula se volvieron a mí con cara de asco. No era casualidad, ya que cuando el profesor preguntó si alguien tenía mis mismos gustos, nadie contestó que sí. “Bueno, como simpatizo con tu música podríamos estar juntos, si ella quiere, por supuesto” . Claro, el chabón, trabajó en radio, fue a todos los recitales habidos y por haber del 92 en adelante y digamos que es uno más del palo. El tema es que no contesté como él esperaba “la verdad que no me copa ni medio; onda, no tengo por qué hacer que mis compañeros se fumen la música que me gusta a mí”. Siempre viniendo a mi mente el típico cumbiero molesto que va escuchando música en el colectivo sin auriculares… Como no me gusta que me lo hagan, yo tampoco lo hago. Entiendo, sé que la ignorancia en mi ámbito va en aumento (“la música que te gusta a vos es ruido”) y no veo por qué hacerles lo que no me gusta que me hagan. Ahí fue cuando me dijo que “tenía que ser un poco más tolerante”. Y ojo, me lo dijo como comunicador. Bleh

Bueno, che, no concuerdo con él, me parece que la idea es mala, porque yo tampoco quiero fumarme una tonelada de cumbia, reggaetón y esa pedorrada nacional al estilo de las pastillas del abuelo… Perdón, soy así, no me gusta. PERO NO SE LO ANDO DICIENDO EN LA CARA A TODOS, me lo guardo sólo para mí y para discutirlo con personas del palo. Nada más… Lo que sí, si tuviera que compartir un tema con ellos, sería este. Simplemente porque me identifica.