Las 4 cuerdas te extrañan...

Hay cambios impredecibles, rotundos en la vida de la gente que a veces te hace alegrar de una manera increíble, una buena noticia o una situación inesperada que se disfruta. También hay cambios que llevan las cosas para mal, como el mal manejo de un conflicto, sorpresas desagradables o poco gratas, cosas que te amargan y que algunas parecieran no tener final… Desgraciadamente, también agrego que hay cambios que una vez que ocurren no tienen cura ni vuelta atrás y que, incluso, pueden terminar con la vida misma. Esa horrible suerte corrió una persona que en el día de hoy está siendo recordada a través de las canciones en las que tuvo suerte de formar parte, y nosotros hoy tenemos el placer de deleitar. Una persona que, por más que nunca la haya visto en vivo (al igual que ustedes) y no haya tenido una extensa carrera, en mi opinión fue una base fundamental para que se asentase el grupo del cual formó parte los últimos años de su corta vida… Estoy hablando nada más y nada menos que de Cliff. Clifford Lee Burton. Conocido, amado, odiado o envidiado, este ejemplar que ejecutaba el bajo con una habilidad y una energía terrible, cruelmente dejaba nuestro mundo un día como hoy, pero 25 años atrás, una fría mañana en una carretera sueca, camino a Copenhague. Los naipes lo sortearon, el azar lo quiso y sumándole una imprudencia de un chofer al volante, fue como una gran vida se perdió para siempre. Lo que serán las vueltas del destino, que si no era él, perfectamente pudo haber sido Hammett… Pero no, era él al que la parca se la tenía jurada, y bueno… El resto es historia.

Esta vida perdida no sólo representó un inmenso dolor entre sus más allegados y los fans de la banda que se estaba formando, sino también el fin abrupto de una carrera que pudo haber tenido muchísimo éxito… La verdad, este joven de apenas 24 años prometía muchísimo; su virtuosismo, su habilidad y su talento con las cuatro cuerdas, combinados con su sentido del humor, su carisma y su feeling con los otros 3 miembros de la banda harían, sin lugar a dudas, hacer llegar a Metallica lejos, verdaderamente a otro nivel. Una promesa que jamás se ha de cumplir, una situación que nunca se va a poder revertir, dejando a millones con sed de ver algo que nunca experimentaron, añorando imposibles y rememorando aquellos buenos tiempos a través de videos musicales y entrevistas… Una cosa realmente lamentable.

Al día de hoy somos muchos los que lo admiramos sin haberlo conocido. Lamentablemente, mi nacimiento se dio 9 años después de esta tragedia, y aún así lo extraño. Una rareza de sentimiento, pero creo que no está demás aclararlo, ya que un insensible, o simplemente un idiota, como quieran rotularlo, comentó en uno de mis estados que, justificando que no había nacido para ese entonces, debía superarlo… Este ente aparentemente nunca escuchó AC/DC, The Beatles, Ozzy Osbourne u otra de las tantas bandas que tuvo la desgracia de ver a uno de sus miembros perecer…

Otro pequeño homenaje de mi parte a un monstruo de la música.

Descanse en paz, Cliff Burton.

[1986-2011]