Leidis and llentlmen, muy pero muy buenas noches to evrivodi. DDDDALE, menos inglés tenía la vaga… Okey, ya saludé, ya fui cortés con todos (hasta con los p*tos que no sé para qué entran si no les gusta lo que escribo) y paso a flasharla un poco y a estirar esta entrada cual chicle hubba bubba de 3 horas y media.
Bueno, en el día de la fecha, ya estamos pisando lo que es el último día del tercer mes del año. Carajo, parece ayer cuando estaba celebrando la llegada del año… Dale marzo, media pila, pudiste haber sido mucho mejor de la garcha que terminaste ser. Bah, en realidad, no. Hubo cosas buenísimas, más que buenísimas, podría llegar a decir que rozaron la perfección. Pero por otro lado hubo cosas negras, cosas que no me gustaron en lo más mínimo. Sinceramente, marzo, dejaste mucho que desear. PEEEEEERO BUE, como
Now, the new goals , the new aspirations, are all for the month that is coming… ABRIL, sisí señores, abril me espera con grandes esperanzas. Fuck, no por nada en especial, pero he de suponer que va a ser un mucho mejor mes… Así que, con el principio del fin (del mes), me voy retirando… Oh sí, ya casi termino la entrada de mi quinto encuentro con cupido… Y tengo que seguir con mi sanguinaria novela, cuyo nombre provisorio que uso para guardar el petearchivo en Word es “Chronicles of a mad maiden” [no, no te asustes, no está en inglés]. Saludos por ahora, y larga vida al Heavy Metal.
Rocío A. Vikernes
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